La violencia hacia las mujeres ¿indiferencia en las jóvenes?

Soc. Emma Cerón Díaz

Hace unos meses en una Conferencia sobre comunicación en Chihuahua, una investigadora habló de la violencia hacia la mujer, al concluir la ponencia, una chica de 20 años (más o menos) le reclamó fuertemente por exponer un tema, según dijo, muy repetitivo, habló de estar harta de escuchar el tema y de que sea victimizada la mujer, y se preguntaba si “ellas” no eran culpables.

En ese momento me pregunté el por qué hablar de la violencia hacia la mujer incomodó tanto a esta chica, estudiante de comunicación. Así mismo, en otro espacio, la opinión de otras chicas de la misma universidad, fue que la violencia hacia las mujeres es publicidad y argumentaban que ahí sólo había “sicariadas”, pero feminicidios no. Ellas piensan que la violencia hacia las mujeres es un fenómeno personal y no social, portarse “bien” y no salir solas, es suficiente para evitar ese tipo de violencia.

Es posible que su visión se haya fomentado -entre otros factores- porque para algunas jóvenes las cosas han cambiado, hoy, algunas de ellas cuentan con mejores condiciones de vida: Van a la Universidad; pueden decidir sobre algunas cosas; pueden votar; se consideran “liberadas”; se sienten “incluidas” y no violentadas, en fin… son jóvenes “modernas”.
Para éstas jóvenes que han mejorado sus relaciones de vida, al parecer, les cuesta reconocen el significado de la exclusión y discriminación por ser mujer. La comparación con las generaciones pasadas, las convence que ahora son “más libres”, que no hay discriminación, que ya no son subordinadas, así las cosas ¿Qué significado puede tener, para éstas jóvenes, el que macheteen a una mujer por no tener las tortillas a tiempo? ¿Qué significado pueden tener los asesinatos de mujeres, si consideran que es una cuestión personal?... Ninguno, como tampoco lo es para muchos y muchas que creen que las desigualdades se han superado y el feminismo es sólo un slogan anticuado y aburrido.

Paradójicamente éste año (2009) se han perdido más derechos de las mujeres mexicanas que nunca, y los hechos como los feminicidios y la modificación a las constituciones de 17 estados de la República Mexicana a “favor de la vida”, no ha impactado (todavía) en el sector de las jóvenes, a tal grado que una mayoría han permanecido indiferentes a los movimientos por los derechos de las mujeres, no se organizan, no participan.

Las experiencias personales de estas jóvenes, no pueden hablar por todas, aún hoy día hay mujeres violentadas de manera cotidiana en todos los espacios sociales, por ello es que No podemos dejar de hablar de la problemática de la violencia hacia las mujeres, no importa que para algunas jóvenes les sea molesto o repetitivo.

No percibir la discriminación y no “sufrirla” es una quizás sea una fortuna, pero la indiferencia ante el dolor de las demás, no puede ser un elemento constituyente de la vida moderna de las jóvenes, menos ahora que sea han limitado los derechos de las mujeres y tarde o temprano a muchas de ellas impactará.